COLOQUIO DE LA RED DE CRONISTAS DE LA REGION VALLES, JALISCO
CUVALLES 2008
PLAZA DEL CENTENARIO
Por: Sergio Zepeda Navarro
Alrededor del siglo XIII, comenzaron a crearse ciudades, pueblos y villas; los pueblos se trazaban con calles paralelas a los ríos, corriendo otras paralelas a una calzada principal, formando un rectángulo. Es muy probable que tal resurgimiento sea una característica del Renacimiento, de ese deseo de avivar las culturas clásicas de Grecia y Roma.
De esta forma, en “Un plano rectangular consistente en cuatro secciones iguales formadas por dos calles principales que se cruzan en ángulo recto en el punto central donde se dejó una plaza abierta, hacia la cual daban la iglesia, la alcaldía, la cárcel y otros edificios públicos... Las calles secundarias corrían paralelas a las principales, dividiendo a las comunidades en manzanas” 1
La plaza de armas corresponde a la principal plaza de la mayoría de las ciudades de América Latina. En general, junto a ella se ubican los principales edificios gubernamentales, culturales y sociales, siendo el centro de vida de la comunidad de una sociedad.
La mayoría de las ciudades construidas por los conquistadores españoles se basaron en una estructura de calles en forma de Damero (es decir, calles perpendiculares, dando origen a las cuadras simétricas, como un tablero de ajedrez) basado en el Castrum Romano, destinando uno de los cuadrantes para ser la plaza de armas, alrededor de los cuales estaban los palacios administrativos, la iglesia y el mercado. El nombre deriva de que esta zona estaba destinada como refugio en caso de una ataque a la ciudad, por lo que poseía guarniciones de armas.
En el imperio romano, una castra (plural castrum, castri, una fortaleza) era un campo militar romano. Originalmente, un castrum es una fortificación celta que semeja un castillo rodeado de una muralla circular en la cima de una colina. Los romanos usaron luego el término para designar sus campos militares, que eran rectangulares. Los campos romanos siempre fueron edificados acorde a un cierto modelo, con dos pasos principales que se cruzaban: el CARDUS MAXIMUS, extendiéndose al norte y al sur, y el DECUMANUS MAXIMUS, al este y oeste, dividiendo el campo en cuatro partes iguales. Las avenidas acababan en cuatro portales. El Forum se ubicaba en la intersección del CARDUS MAXIMUS y el DECUMANUS MAXIMUS.
El resto de las calles y construcciones se hallaban paralelas a las principales, las cuales formaban un patrón de cuadrícula que se utiliza mucho en las ciudades.
Varios poblados en Europa surgieron a partir de campos militares romanos y hasta el día de hoy muestran rasgos de sus modelos originales (Francia, Barcelona, España).
El Castrum fue la base del modelo empleado por los colonos españoles en América, el tablero de 7 manzanas de 100 metros por lado con una Plaza de Armas en el centro cerca de un río y de una colina defendible, siguiendo estrictas normas impuestas por la monarquía española para la fundación de nuevas ciudades en el Nuevo Mundo.
La mayoría de las ciudades durante el Virreinato se crearon bajo la planeación de este trazo, implantado por la política del Emperador Carlos I de España y V de Alemania hacia el año de 1523, quien dictó disposiciones para fundar ciudades, villas y pueblos. Más tarde continuado por su hijo Felipe II, quien además dictó ordenanzas de gran valor que pasaron a formar parte del Código de Indias.
En la plaza principal no debería otorgarse solares a particulares, sino que era para uso exclusivo de la iglesia, casas reales y autoridades locales. Se buscaba siempre lo conveniente de que la comunidad se estableciera aledaña a una fuente de agua, ya fuera río o manantial, y conforme las manzanas se alejaran del centro, éstas irían decreciendo en escala social y en tamaño de los solares.
En general, había la pretensión de que la plaza fuera integradora de la población urbana o campestre en todo su conjunto, pudiendo afirmar con ello que se erigía en el núcleo de la ciudad o población, hacia donde acudían los habitantes para realizar las manifestaciones más importantes de su colectividad, es decir: paseos, festejos, mítines, comercio, aprobación o desaprobación de la acción gubernamental y... duelos, entre otras.
La imagen arquitectónica de San Martín de Hidalgo, podría dividirse en dos zonas; la zona periférica y la zona centro. En la primera de ellas domina una arquitectura vernácula; las construcciones son modestas, en su generalidad de adobe con cubiertas de madera y teja; sin embargo la modernidad ha suplido los sistemas constructivos empleando materiales como el acero, el ladrillo y el concreto.
En la segunda zona, la del centro, destacan casas antiguas de estilo neoclásico con grandes alturas, donde predominan las cubiertas de viga, madera y terrados. El esquema urbano responde a un emplazamiento que jerarquiza la Plaza de Armas del Centenario como centro cívico, donde se encuentra un kiosco central y una traza de jardines de forma geométrica, con bancas de material interiores que rodean al mismo y bancas metálicas en la perimetría. En conjunto con esta plaza destacan dos portales dispuestos en “L”; el portal Independencia al sur donde alberga la Presidencia Municipal y diversos giros comerciales y al poniente el Zaragoza, conformado por otros negocios.
En la esquina norponiente de dicho centro cívico se encuentra la parroquia de San Martín, la cual responde a un estilo neoclásico; antepuesto a esta, se encuentra un atrio de grandes dimensiones con su respectiva vegetación, y en una de las esquinas se ubica el busto a Don Miguel Hidalgo y Costilla, donada por el Gobernador del Estado Don Francisco Medina Ascencio, obra del escultor tapatío Salvador Andrade. Y al frente de la parroquia se encuentra la Capilla de la Purísima Concepción, conocida también como La Conchita.
Muy probablemente la construcción de la Plaza de Armas y el desarrollo de la infraestructura urbana así como la planimetría de las calles de lo que hoy es el centro, ocurre entre los años de 1885 a 1887 en las administraciones municipales de Juan Cedano y Felipe Vergara (recordando que es éste último, el que recibe el Decreto No. 35, emitido por el H. Congreso del Estado, donde se concede el cambio de nombre de San Martín de la Cal a San Martín de Hidalgo, el 12 de septiembre de 1883), el Gobernador del Estado, el General Francisco Tolentino informaba a la sociedad estatal que: “en San Martín se formó una plaza, colocándose 4 faroles para iluminarla, se construyeron dos elegantes portales y se empedraron las calles”, era el 2 de Febrero de 1887.
Aún ante una inestabilidad gubernamental en el Estado y bajo la gobernatura del Ingeniero Mariano Bárcena y del Lic. Ventura Anaya y bajo la administración municipal de Reyes Anaya, en 1890 proseguía la consolidación urbana del primer cuadro, porque se informaba de nueva cuenta a la sociedad estatal de los logros obtenidos en este aspecto, mencionándose: “Se recompuso la plaza de armas; se establecieron cuatro faroles más y se plantaron especies de árboles como el naranjo”.
Para 1892 y bajo la gobernatura del Coronel Francisco Santa Cruz y del General Pedro A. Galvan y siendo presidente municipal Raymundo Santos, se colocaron 14 bancas de fierro en la plaza y se agregaron 8 faroles más y se empedraron varias calles.
En 1898, siendo gobernador el Licenciado y General Luis C. Curiel y el Dr. Juan R. Zavala, y en nuestro municipio durante este año teníamos a tres presidentes municipales: José Rosas, Francisco López y Teófilo Zepeda, se realizan mejoras materiales en las azoteas de los portales Independencia y Zaragoza, así como en la plaza de armas.
Arribamos al siglo XX, el siglo de los inventos y de los avances tecnológicos. En el informe de 1900, se menciona en la capital del Estado siendo gobernador el Dr. Juan R. Zavala y presidente municipal Domingo Buenrostro que el empedrado de las calles que circulan la plaza principal es mejorado y se vuelven a instalar 8 faroles más.
En 1901, el Lic. y General Luis G. Curiel informaba que en San Martín se habían colocado 12 nuevos faroles de alumbrado público, se repuso la enlosada de la plaza principal, siendo beneficiada la administración municipal de Reyes Zepeda y J. Trinidad B. Zepeda.
Precisamente en 1902 se inició la construcción del kiosco en el centro de la plaza bajo la dirección de Don Severo Gerónimo (mención muy especial, puesto que la construcción de los portales, el templo y el kiosco estuvieron a su cargo) , estando a las órdenes del Sr. Presidente Municipal Domingo Buenrostro, contando con el apoyo del Sr. Gobernador Dr. Juan R. Zavala.
Para 1903 se remozaron los faroles del alumbrado público de la plaza, así como las bancas de fierro, comprándose 3 más, siendo presidente municipal de nueva cuenta Domingo Buenrostro.
Entre 1904 y 1908 la plaza de armas se conservó y se le dio mantenimiento, para 1909, siendo presidente municipal José Encarnación y Epifanio Páez se aumentaron a 9 faroles el alumbrado público, se reformaron 16 bancas de fierro y se pusieron 2 lámparas de gasolina en la plaza (anteriormente se encendían con un aceite traído de Tecolotlán), todo con el apoyo del Gobernador el Coronel Miguel Ahumada.
“Se llevaron a cabo las celebraciones del Centenario de la Independencia en esta plaza de armas, bajo un programa especial.
El día 15 de septiembre de 1910, hubo una velada literario- musical que constó de 14 números entre oberturas y poesías.
1. Interpretación sinfónica de la obertura Corona de Azahares.
2. Poesía por el niño Ignacio Reynoso, titulada 16 de septiembre.
3. Vals Amor de María, por la orquesta local.
4. Poesía por la niña Hermelinda López.
5. Interpretación orquestal del chotis Grata Impresión.
6. Discurso a cargo del señor José María González Cisneros.
7. Vals Por tú Amor.
8. Poesía 1910 por el niño Alfredo Santos.
9. Musicalización del vals Morir por tu Amor.
10. Canto llamado El Duo de la Tempestad a cargo de las señoritas Bandelia Sedano y María Palacios.
11. Obra musical a ritmo de two steps (dos pasos) conocido como Por Tú Amor y Honor.
12. Espacio abierto al público para opinar en tribuna.
13. Interpretación musical del chotis Suspiros.
14. Lectura a las 11 de la noche del Acta de Independencia, se vitoreará a México y sus héroes, interpretación del Himno Nacional, repique de campanas y salvas de cañonazos.
Día 16 de septiembre, el programa de festejos se llevó a cabo en el Teatro Libertad con un programa de 15 números.
1. Obertura Dragón Valiente.
2. Poesía por la niña Ángela Virgen.
3. Interpretación musical La Risa de los Negros.
4. Poesía por el niño Manuel Ramírez.
5. Melodía a Guerrero por el Coro de niños.
6. Poesía por el niño Enrique Vizcaíno.
7. Jota Las Churumbelas.
8. Discurso por el señor Epifanio Páez.
9. Vals La Tarde Azul.
10. Grupo de niñas con la Trilogía a la bandera.
11. Danza A la Luz de la Luna.
12. Tribuna libre para el público.
13. Vals Dicha Realizada.
14. Melopopeya (recitación acompañada de música) a cargo del señor Alfonso Zepeda.
15. Interpretación del Himno Nacional por el Coro de Niños y Niñas.”
Para el 2 de abril de 1911, entró en vigor el servicio de energía eléctrica con el apoyo del gobernador José López Portillo y Rojas, quien en su informe decía: “Mejora de importancia para aquella población ya que facilita que la vigilancia de la policía sea más activa.” Siendo nuestra Villa gobernada por cuatro presidentes municipales durante este año: Luis G. Vizcaino, J. Jesús García y Alfonso y Vidal Zepeda.
Para 1910, estalla el movimiento armado mejor conocido como Revolución Mexicana (analíticamente desde la visión científica de la historia fue una guerra civil) y en plena revuelta maderista esta plaza de armas fue escenario de uno de los combates de la lucha contra Victoriano Huerta, donde las fuerzas del cabo segundo José Álamo se enfrenta a los revolucionarios de Soto y Alonso, era el 27 de Febrero de 1914.
Ocurre un hecho lamentable para el futuro de la vida administrativa de esta Villa, en el año de 1915, Julián del Real y un grupo de bandoleros, defensor de los principios Huertistas, asaltan la población y entre las acciones que realizan se quema parte del Archivo Histórico que guardaba la memoria de los primeros años de una vida pública en el ámbito administrativo y con ello tenemos un gran hueco informativo que jamás podremos recuperar.
Un acontecimiento sumamente importante para nuestra historia municipal es la repartición de tierras a raíz del movimiento armado y precisamente el Sr. Gobernador, el General Manuel Macario Diéguez mandó medir las tierras para delimitar el fundo legal de la población, refiriéndose a las tierras que no serían afectadas porque pertenecían al común del pueblo.
Fundo Legal del Pueblo de San Martín de Hidalgo, Jalisco.
Quinto Cantón de Jalisco
16 de julio de 1916
En la Villa de San Martín de Hidalgo del estado de Jalisco a las 7 de la mañana del lunes 16 de julio de 1916. el Ingeniero Antonio Rolón previo convenio con los señores Silvestre Coracero, cabeza del pueblo y Mateo Gómez, apoderado general de la comunidad indígena del propio lugar, visto el título de tierras que me presentaron los referidos ciudadanos expedido por el gobierno de Don. Manuel M. Diéguez, del centro principal de la plaza de armas se tiró una línea recta hacia el oriente de 2,000 metros, fijándose una señal de mojonera en El Tepehuaje y siguieron las demás medidas hasta completar un cuadrado de 4000 metros por lado, contando con una superficie de 1600 hectáreas. Este año tuvimos a tres presidentes municipales: Isaac Pérez, Valentín García e Ignacio Montaño.
Esta acción generó una reacción de los terratenientes afectados y por órdenes superiores se suspendió la posesión, devolviéndose la tierra a sus antiguos propietarios, otorgando sólo el 20% de lo obtenido en las tierras que por un instante fueron propiedad de la comunidad.
Otro de los acontecimientos ocurridos en esta plaza de armas fue la visita de Don Venustiano Carranza, en su gira proselitista el 26 de febrero de 1916, dicho sea de paso en la elección del 2 de diciembre de 1917, obtuvo 161 votos, donde fueron electos para munícipes propietarios Erasmo Águila con 307 votos, Silvestre Coracero con 107 votos y Pedro Casas con 71 votos; siendo suplentes, Estanislao Medina con 307 votos, Leopoldo Zepeda con el mismo número de sufragios, José Rubio con 71 votos y Pablo López también con 71 votos.
El documento que menciona ya a esta plaza de armas como “Plaza de Armas del Centenario”, fecha su inauguración el mes de marzo de 1923, durante la administración municipal de Don Alfonso Zepeda. Como se darán cuenta nada que ver con los festejos locales correspondientes al Centenario de la iniciación de la Guerra de Independencia.
Llega el año de 1926 y con ello el inicio de la Revolución Cristera que termina hasta 1929 y precisamente en la Sesión Ordinaria llevada a cabo el 31 de enero de 1929 se toman los siguientes acuerdos: - En seguida el C. Presiente Municipal, Don Alfonso G. Cevallos, expuso al H. Ayuntamiento, que viendo que el sueldo asignado al cabo de policía es sumamente bajo dadas las labores que desempeña en la actualidad, y siendo de imprescindible necesidad llevar a efecto varias mejoras de reconstrucción como las del pavimento de la Plaza del Centenario de esta Villa y otras que son muy necesarias, propone el ilustre Ayuntamiento si lo tienen a bien se sirva ampliar las partidas número 14, 29 y 32 del Presupuesto de Egresos Municipales. - A la número 14, $37.50 que arrojan los 150 días del primero del mes actual al 30 de junio del presente año a 25 centavos diarios; a la número 29, $100.00 pesos, y a la número 32, $60.00 pesos.
Aunque esta plaza del Centenario no fue escenario de ningún enfrentamiento armado, pero si existió un plan de ataque a la población fechado el 18 de marzo de 1929, firmado por el General en Jefe de las Fuerzas Armadas, Jesús Degollado Guízar y por el Coronel y Jefe del Estado Mayor, José Gutiérrez; si recibió los cuerpos de los miembros de las defensas sociales que fallecieron en la batalla del 19, 20 y 21 de marzo de 1929, ocurridas en El Moral y Cocula: J. Guadalupe Acuña, de 19 años, originario de San Martín. Ignacio Rosas, de 25 años, originario de San Martín. Pablo Rosas, de 60 años, originario de Los Guerrero. Cirilo Solórzano, de 30 años, originario de San Martín. Candelario Barbosa, de 28 años, originario de San Martín. Plutarco Aguilar, de 30 años, originario de San Martín. Manuel Vergara, de 35 años, originario de San Martín.
Un acuerdo interesante es el que se toma en la Sesión Extraordinaria del 18 de enero de 1930:
1° Campaña contra el alcoholismo.
2° Campaña contra la vagancia y la mendicidad.
3° Campaña contra el lenguaje soez.
4° Campaña contra la portación de cualquier tipo de armas.
5° Campaña contra la indecorosa indumentaria de nuestro pueblo, (uso de pantalón durante las horas de serenata en el cuadro interior de la plaza.)
Firmado por el presidente municipal, Don Alfonso G. Cevallos.
En la Sesión Ordinaria del 28 de Febrero del mismo año, se toma el siguiente acuerdo sobre normas de urbanidad: 2° Fíjense avisos en los lugares públicos prohibiéndoles a los ciclistas transiten por banquetas, portales y plaza donde haya influencia de transeúntes, seguía siendo presidente municipal Don Alfonso G. Cevallos.
Durante la Sesión Extraordinaria del 30 de septiembre se toman varios acuerdos referentes a obra pública y entre ellos destaca el: 3° Minístrese a los C. C. David Guerrero Maclovio Campante y Gregorio Gómez las cantidades de $15.00, $40.00 y $39.90 respectivamente para el pago de cemento y mano de obra de las reparaciones hechas a la plaza de armas local.
Para el mes de octubre se toma otro acuerdo en la Sesión Ordinaria, importante para la arquitectura de la Plaza: 2° Gírese orden al C. Tesorero Municipal entregue con cargo a la partida #32 la cantidad de $127.92 al Sr. Silvano Montelongo en pago de las reparaciones que hizo al Kiosco de la Plaza Principal
Las mejoras materiales seguían su curso para el primer cuadro de la cabecera municipal y en la Sesión Extraordinaria del 20 de Diciembre 1933, se toma el siguiente acuerdo: - Único.- Páguese a las siguientes personas la cantidad de $102.00: Nemesio Medina.- Ladrillo y efectivo que ministro para dar principio a las banquetas del Portal Zaragoza y la Plaza de Armas del Centenario, era presidente Don Francisco G. Camacho.
El 10 de Abril de 1934, se lleva a cabo la Sesión Extraordinaria, tomándose varios acuerdos entre ellos sobresale el: Tercero.- Se aprueba el gasto de $300.00 para empedrar la calle Independencia con su extremo sur y compra de ladrillo que hace falta para continuar la banqueta que se principio a construir en la plaza principal frente al portal Zaragoza, ocupaba la presidencia municipal Don Rafael Pérez.
Inician las obras de mejoras en el interior de la Plaza, así lo manifiesta el acuerdo tomado en la Sesión del 18 de Marzo 1936: - Construcción de una pila para agua en la plaza de armas ubicada al noreste de la misma, tenía a su cargo la presidencia municipal Don Francisco García.
El año de 1937 muestra actividad en la obra pública sobre la Plaza de Armas del Centenario, así lo manifiesta el libro de actas de este año: Sesión del 30 de Mayo 1937 - El C. Francisco Zárate solicita que el Presidente Municipal apoye discrecionalmente todas las peticiones que lleguen a esa corporación referentes a la entrega de tierras ociosas. Se solicita plan para embellecer el jardín de la plaza pública.
Sesión del 15 de Junio - El C. Avelino Díaz encargado de la Comisión de Ornato propone al C. Francisco H. Camacho como encargado de hacer las modificaciones al jardín para embellecerlo.
Sesión del 31 de Septiembre - Se presenta el proyecto de embellecimiento del jardín principal que consiste en una innovación de plantar unas hileras de plantas a orillas de los prados.
Sesión del 30 de Octubre - El C. Francisco Zárate comisionado de Mercados hace del conocimiento que estando próximas las fiestas que se celebran anualmente con motivo de San Martín, presenta un proyecto a fin de que los comerciantes ambulantes que anualmente hacen su aparición no sufran en sus mercancías y al mismo tiempo no se desatienda al público recomienda se instalen en una sola acera en los cuatro costados de la plaza todos aquellos que tengan productos similares.
En el año de 1949, ocupaba la presidencia municipal Don Juventino Gómez , quién ordenó se retiraran los naranjos de la Plaza y se plantara otra variedad de flora.
A partir de la segunda mitad del siglo pasado es cuando se logra otorgar el perfil arquitectónico que prevalece hasta nuestros días, se construyen los prados y se plantan rosales y palmas en los mismos, desaparece la hilera central de bancas y se instalan las lámparas adheridas a los prados, se construyen las escalinatas del kiosko.
Y para 1978, siendo presidente municipal el Prof. J. Jesús Camacho Barreto, la plaza de armas del Centenario sufre su mayor remodelación, con la dirección del Arquitecto Horacio Santiago Luna, se levanta el piso tradicional y se coloca adoquín, se retiran las fuentes ubicadas al este y oeste de la misma, se retira la banqueta ubicada al oeste y se cierra la calle Simón Bolívar, colocándose otro tipo de bancas y las luminarias son ubicadas en el interior de un pequeño circulo con pasto, se coloca una pequeña explanada donde son situadas dos nuevas fuentes (una al norte y otra al sur) se designan tres espacios para jardines, se nivela el terreno del lado norte, adoquinándose también las calles Aldama y Gabino Barreda.
Durante la Administración Pública del Mayor Joaquín Morales Abreu, se realizan mejoras y en sus respectivos informes de gobierno menciona: el jardín de la plaza cívica principal de la cabecera municipal se cuida con espero, para que nuestras familias disfruten de la tranquilidad física y espiritual, además de musicalizar las noches de los domingos, utilizando el sonido ambiental.
Con el Sr. Ramón Guerrero Ríos, se construye el foro municipal que por algunos años fue el sitio de expresión tanto de actividades culturales como políticas y conmemorativas, esto durante el año de 1984.
Para 1985, se coloca la primera piedra en la celebración del aniversario de la fundación de nuestro pueblo, de lo que será el monumento dedicado a la Madre y que hoy se encuentra ubicado en la plaza de armas.
En las siguientes administraciones se mejora el alumbrado y se le da mantenimiento a la infraestructura arquitectónica de la misma.
El Sr. Delfino Rodríguez Bernal, como Presidente Municipal, recibe la visita del Lic. Carlos Salinas de Gortari y del Lic. Guillermo Cosío Vidaurri el 24 de enero de 1992, para entregar a la sociedad sanmartinense obras públicas, sobresaliendo la conclusión de la primera fase de pavimentación con concreto hidráulico y la remodelación de banquetas del primer cuadro e inclusive en su informe de gobierno rendido el 7 de marzo del mismo año menciona: “con el programa de Solidaridad se remodeló la plaza principal que tenía problemas de nivelación de piso y el mal estado del adoquín, se hizo cambio del mismo, se reemplazaron las bancas, se colocó cantera en los jardines y se rehabilitó el kiosko”.
Con la administración del Sr. Casimiro Zárate Guerrero, se concluye la primera etapa de pavimentación con concreto hidráulico y se remodelaron las banquetas del primer cuadro, esto lo dio a conocer a la sociedad sanmartinense el 6 de marzo de 1993.
Durante la presidencia municipal del Dr. Carlos Alberto Rosas Camacho 1995 - 1997, se le otorga mantenimiento a la plaza y se instala el enrejado de los jardincitos laterales y en las jardineras principales con el fin de evitar la continua destrucción de los vegetales ahí plantados, lo refiere en su Primer Informe de Gobierno de 1995, además de reconstruir los machuelos, bases, enjarres y molduras y molduras del kiosko, lijado de la cantera en las jardineras, reconstrucción del adoquín y pintura del mobiliario del mismo kiosko.
Con la Srita. Lupita Urzúa Flores 1998-2000, como presidente municipal, los jardines son modificados, se retira la herrería de los mismos y se hace un nuevo diseño que todavía hasta la actualidad permanecen.
De nueva cuenta en la presidencia municipal el Dr. Carlos Alberto Rosas Camacho 2001-2003, se preocupa por conservar la infraestructura arquitectónica e incorpora una nueva iluminación y construye las rampas tan necesarias para las personas que lamentablemente utilizan sillas de ruedas para poder realizar sus actividades, además de reparar el techo del kiosko debido a los fuertes vientos que generaron el desprendimiento del mismo.
Con la administración del Ing. Vicente Aceves Santos 2004-2006, se hace una remodelación de los 4641.26 mts., de esta explanada donde nos encontramos ahora, definiendo el proyecto como “Remodelación de la Plaza Cívica”, de la siguiente manera: “Este proyecto obedece la necesidad especial de la población ya que el incremento poblacional de la cabecera municipales tal, que el actual espacio destinado para la plaza es insuficiente para el número de habitantes que en ella habitan. El proyecto pretende dar solución a la problemática antes mencionada, considerando que con la ampliación de este espacio lograremos contar con una explanada donde desempeñaremos varios eventos cívicos, culturales y artísticos. Además de mejorar la imagen urbana al primer cuadro de la cabecera municipal, y al contar con un asta bandera de gran magnitud, se le estaría dando a la población un mayor realce por ser la única en su tipo que se colocaría en el municipio. Con ello se buscará los mecanismos adecuados para darle una mayor promoción turística a la cabecera municipal y al municipio”.
Se colocan dos nuevas fuentes, así como se remplazan las bancas de la plaza y se colocan las nuevas bancas en la explanada, se retira el foro que anteriormente había sido escenario de diferentes tipos de eventos.
Pues bien este es un recorrido histórico por la evolución de la plaza de armas del Centenario, sólo quiero agregar que todo el primer plano ha sufrido una verdadera metamorfosis desde su surgimiento, claro que las necesidades así lo han requerido, pero lamentablemente en muchos casos obedecieron a gustos particulares o de grupo político sin considerar a la Ley del Patrimonio Cultural y Natural del Estado de Jalisco y sus Municipios, así como la Ley de Monumentos y Edificios Antiguos, creo que existe la posibilidad de buscar declarar a este lugar Centro Histórico y con ello conservar lo poco o mucho que nos queda de la originalidad, así como respetar precisamente el Patrimonio que nos han legado los sanmartinenses del siglo XIX, XX y que heredaremos a nuestros hijos y es que lamentablemente en aras de un mal llamado y peor entendido progreso se han derribado fincas, los portales han sufrido remodelaciones, se han retirado nombramientos realizados a algunos espacios, como el caso de la Calzada José Vargas, la plaza inclusive se ha pintado con colores de partidos políticos, faltando a un respeto que estos monumentos deben de tener.
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